domingo, 29 de junio de 2014

IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN MORAL

Educación Moral en el Contexto de una Sociedad Democrática y Plural.
            Tiene como objetivo principal dotar a la persona de los conocimientos básicos que le permitan adquirir la autonomía y la orientación  racional necesarias para enfrentarse a situaciones problemáticas, así como las habilidades sociales para resolverlas. También es el eje  socializador, puesto que su objetivo principal es ayudar al individuo a integrarse a la sociedad permitiéndole ser creativo, crítico y transformador. La educación moral dentro del contexto de una sociedad democrática y plural, pretende que cada sujeto sea el autor de su propia historia, para lo cual debe tener en sus manos la responsabilidad y la toma de decisiones


Factores para programar experiencias de aprendizaje moral, de acuerdo a:
Elementos de la Conducta Moral  (Conciencia, responsabilidad, acciones autónomas y heterónomas, ética del currículo y clima moral de la escuela).
 La Conciencia Moral: es la facultad que nos permite darnos cuenta si nuestra conducta moral es o no es valiosa.
Responsabilidad:
 Acciones autónomas y heterónomas:
Se dice  de individuos capaces de regirse por principios que permitan la convivencia y la solidaridad entre grupos e individuos.
Acciones autónomas:
Siempre y cuando el hombre obedezca a su voluntad obrará libremente, autónomamente y racionalmente.
Conducta Heterónoma:
Es aquella cuya norma guía procede de una instancia diferente a la del propio individuo libre: padres, profesores, amigos, ideologías políticas, credos religiosos…. O cuando la norma obedece no al deber en sí mismo sino a fines u objetivos que satisfagan nuestras inclinaciones y deseos.
Ética del Currículo:
 La importancia de la ética dentro del currículo  se considera como una práctica y normativa donde el comportamiento de los hombres  que conviven socialmente bajo una serie de normas  le permite ordenar  sus acciones y actuaciones.
Clima Moral De La Escuela:
La interacción en una clase exige que sus alumnos vayan mas allá de compartir la información, es necesaria una atmósfera de confianza y aceptación, en la que el respeto mutuo y la justicia sean cultivados intencionalmente, porque los niños necesitan escuchar a otros y ser escuchados.

Otros factores fundamentales que inciden en las estrategias para la educación y el desarrollo del clima moral de la escuela pueden ser:
Disposición en el aula: que facilite el debate entre los alumnos y la comunicación con el profesor
Distribución de los grupos: los grupos pequeños llevan menos riesgo en la apertura, especialmente cuando los alumnos comparten sus ideas sobre problemas morales por primera vez
Proponer modelos de aceptación: una atmósfera que no juzgue es indispensable si queremos que los alumnos sientan que pueden compartir abiertamente sus ideas sobre temas morales. En este sentido el respeto por las diferencias individuales, ya sea, según su nivel socioeconómico, racial, étnica etc.  Es indispensable para lograr crear un ambiente de confianza y reflexión
Técnicas de escucha y comunicación: en la escuela es necesaria la habilidad de escuchar y comunicar eficazmente con los alumnos. Esta capacidad para escuchar atentamente, es lo que va a ayudar a los niños a aprender a comunicarse con los demás
Animar a la interacción entre los alumnos: cuando se ha logrado crear experiencia de interacción, los niños comienzan a iniciar  este proceso de aprendizaje por sí mismos, es decir, aprenden a confrontar  y estimular mutuamente su pensamiento 


Los objetivos de la educación ética y moral están nucleados alrededor de los conceptos de autonomía y autorrealización: Una tarea indeclinable de la escolaridad en todos sus niveles debe ser el desarrollo de la autonomía en los alumnos. Formar personas capaces de pensar por sí mismas, de actuar por convicción personal, de tener un sentido crítico, de asumir responsabilidades requiere reconocer sus capacidades para asumir los valores, actitudes, normas que le trasmiten los diferentes ámbitos de socialización, al tiempo que se reconoce su capacidad de apropiarse activamente de estos contenidos culturales y recrearlos y construir nuevos valores. Se trata de favorecer el desarrollo de una conciencia moral autónoma, subrayando el profundo arraigo y dependencia del ser humano del contexto cultural en el cual se forma, al tiempo que se reconoce su capacidad de razonamiento, de abstracción que le permite tomar distancia de esto que le es dado, y asumirlo críticamente a partir de valores y principios que hacen referencia a contenidos universales; un ejemplo de estos contenidos son los derechos humanos.